Este blog es continuación de mis otros dos anteriores (2008-2023): "El cuarto claro" (Poesía) y "Meridiana claridad" (Fotografía).

Poker face

 



Ante mí


Tan a expensas del cielo

azul las flores otoñales

elevan livianas plegarias 

sin lágrimas

ni de dolor ni de amor

salvo por la luz blanca

de su tiempo detenido.

me descubro ante mí

como la intrusa que me habita,

pero nunca me quitaré 

el sombrero ante ella

ni ante ella.

{De "Cura de humildad".}

Leaf lemon

 Leaf lemon

 

Whiter




Milky meat


No avanzo en lo que intuyo 

tengo que 

o debo hacer.

Temo que se me queden

los versos ocultos 

en la bodega del hallazgo,

temo que nunca abandone esta espiral

de vertiginosa pausa que me ocupa,

como si ya no existiera,

como si yo no existiera,

como si,

efectivamente, fuera por fin 

Nadie. Soy

Nadie.

Se blanquea el humo de la discordia,

la niebla blanca acoge a todas las medusas.

Es la marea de leche planetaria,

la verdadera ausencia del poder.


(De "Camino de sirga", 2023)

(Esta publicación se relaciona con ÉSTA y con ÉSTA)

Al pueblo marroquí

 



Oj-alá la marabunta


Como cuando sin querer

pisas un hormiguero

en pleno verano 

y contemplas la tierra

semicalcinada y adobada

con la saliva de sus habitantes

y desmoronas sus primorosas

galerías construidas

con su menudeo constante

entre el ir y el venir

guardando semillas, comida

para cuando el frío invierno,

y sin darte cuenta y de pronto

hasta tus rodillas ya llega

la marabunta y si te descuidas

y no sacudes tus muslos 

                      tus caderas 

                      tu barriga

te ves cubierta de hormigas que hasta 

tu cuello tu boca tu garganta tus ojos tus oídos 

alcanzan y a tu cerebro y a tu corazón 

devoran ellas rebeladas

contra quien les destrozó

su residencia,

así fue

el temblor que sacudió

la tierra que construía

aldeas, pueblos, ciudades, mezquitas, murallas, 

¡torres!

alminares con su propia tierra

convertida en ladrillos de adobe…


Y así debería suceder:

sus habitantes rebelados

contra quien los pisa

sin pisar su tierra

contra quien se erige

como monarca fuera 

del país que rige

habitando países ajenos 

donde se construyen palacios

con piedras y forjados de oro

casi inmunes a todo.


Cualquier marabunta antes

que continuar permitiendo

el poder de la indecencia.




Greyer

 



Nadie

 

Quiero ser nadie,

abarcar el microsegundo

desde la infinitésima parte

de la nada, del ánimo total

engrandecer la miseria

escondida entre los raudales de luz, 

calibrar siendo nadie,

beber sin sed ni esófago,

semantizar los perfiles oscuros

y adolecer de carisma,

enaltecer ser nadie

contra, con y sin el tumulto:

la bandada de pájaros que orbita

alrededor de la musaraña activa

encuerda siendo nadie

quien responde en ausencia de voz.

 

Calma blanda.

 

Crujía de almendro su madera,

tierna miga de tierra

envuelta en la seda sordina de la araña.

Nadie. Calmar.

El sosiego presente, el pasado 

intransitable, el futuro inocente.

 

Nadie seguir siendo

para que todo sea.


Blacker





Black Blood

(Un denso vacío de todo, un huero lleno de nada.)


Inmensurable, el agujero negro

se empequeñece 

para hacerse un hueco en tu pecho,

socava tu piel 

quebrando los huesos,

gangrenando la carne,

atajando la génesis 

de nuevas células,

oxida la sangre hasta asemejarla

al petróleo y sus pétreos

y pútridos secuaces.

Y todo lo atrae,

todo lo traga la garganta

con hambre eterna de todo

hasta ennegrecer de tan multicolor alimento.

Porque todo ansía, todo ingiere,

todo engulle la insaciable onanista

de vacuos cauces y costados escarpias

con atisbo lascivo sobre el todo 

que le permite 

ni ser.


Tan altruista.


Sólo le importa el otro.


Ven sobre mí

para que el dios menor atosigue

estos pulmones ahítos 

y así puedan respirar libres

de la ajena enfermedad lapidaria.

Trágame para vaciarlos

en ti y que su aire te implosione

hasta que seas nube de sangre

blanca, sideral y humano

fenómeno inencontrable

ya.