Este blog es continuación de mis otros dos anteriores (2008-2023): "El cuarto claro" (Poesía) y "Meridiana claridad" (Fotografía).

Caligrafía manuscrita digital poética

 Parece un trabalenguas. O no. Mejor, un trabaneuronas. Todo se debe a la petición de un admirador de mi poesía que además es coleccionista de manuscritos. Para ahorrarme el envío y el gasto en boli y en papel, me propuse escribir en la tablet, con una aplicación de dibujo, un poema de "En un lugar del mundo", lo que no es moco de pavo, al menos para mis capacidades. Ahora a ver si se conforma con este manuscrito digital. Conociéndolo, y sabiendo de su laburo (funcionario de la Biblioteca Nacional de Buenos Aires especialista en libros antiguos, incunables etc e investigador de la Biblia y sus traducciones, de estos con guantes y buzo y bata blanca, sí) hasta pocas semanas después de la llegada de Milei al poder, porque en ese momento fue despedido arbitrariamente, me temo que no, que no se conformará. Así que ya voy pensando en escribirlo a boli con mi ídem de cuatro colores (rosa, violeta, verde y turquesa). Sabiendo de su gusto por el blanco y negro, le regalo mi gusto por los colorines 😜






Presentación de "En un lugar del mundo" el pasado viernes

 Hoy me he despertado sintiéndome culpable. Al poco rato mi mente maduró lo que tendría que haber conseguido durante sus 61 años y ¡eureka!, comprendí. No, culpable, no, sino infinitamente agradecida por la fortuna que se me ha concedido, la realidad de estar rodeada de, como mínimo, quince personas que me quieren tantísimo que han inclinado su voluntad para durante la tarde de ayer calmarme de atención y cariño. No, culpable, no, Sofía, sino pletórica de gratitud por el privilegio que me concedisteis. Así me siento. GRACIAS. Aparte, a esas personas que ayer no pudieron asistir por motivos muy concretos e inesperados tal como habéis tenido a bien transmitirme hoy mismo, las emplazo a vernos durante la Feria del Libro de Sevilla, que se celebrará en breve. Me invade hoy la sensación de ser más mayor, menos menuda, porque me habéis llenado de la grandeza y la generosidad de vuestras almas. (Sábado, 5 de octubre)

"En un lugar del mundo". Ediciones En Huida, 2024.




Ya disponible "En un lugar del mundo"

 


El título de la foto (interpretación digital) de la portada de "En un lugar del mundo" parte de este poema (y de otras fotos que hay por ahí). Hoy lo uso para transmitiros que ya está el libro a la venta. Os dejo aquí el enlace a la página de la editorial, aparte de que podéis encargarlo en cualquier librería.  Y conste, que conste, como soy la negación de la autopublicidad, y no lo digo como mérito (mi padre decía que yo era la"negación del dominó", por lo mal que jugaba) que los poemas que os dejo como muestra no son ni de lejos los mejores ni los "esos" que más se me enganchan, pero sí los congruentes conforme a lo que atino tengo que decir por aquí para informaros sobre el libro en sí. Ediciones en Huida https://www.edicionesenhuida.es/producto/en-un-lugar-del-mundo/


AQUÍ se puede adquirir.


La geoda

El polvo rosa sucede a la lluvia
sobre los juncos verdes. El arroyo
se cubre de velo tornasolado.
La soledad de la piedra se tumba
a descansar de tanta hambre de amor.
Goza con su vientre ahíto de cuarzo
y agua. Odalisca tan dulce y plena
como aquellas hetairas del jardín
nemoroso. En su vergel, edén
o paraíso que no olvidó
de geoda y de cueva del tesoro.

Cuánta diferencia entre aquel mundo
y este de las piedras cuajado
de senderos transitables. La voz
culmina el proceso de la niebla,
se levanta lamiendo los caminos
con su lengua de humecto humo
respirable. En el otro, todo tan vacío
de silencio y perfume, a duras penas
se oxigena mi piel interna,
sin sentidos se suceden mis pasos
ciegos de piedras. Aquí ya sin mi sombra
se me transparentan los caracoles
que crujiendo mueren bajo mi peso
de luz del sol aromatizada
con almanaques de horas interiores
colmadas de correspondencia sin buzones.
Las palomas cultivan el rebaño
de la yerba, mensajean las briznas
a mi regazo, muere la senectud
de aquel mundo tan frío y hueco
como un enjambre de lentejuelas.
Aquí brillan irisadas el interior de las casas
rizadas rebosantes de entrañas
verdes y domésticas transacciones:
el gato juega con el ratón,
el perro se esconde del gato,
el pajarito vuela volcando
los cacharros de los estantes,
la abeja zumba al olor del cocido,
baila como una gitana alrededor
de la válvula de escape y todo
se me cumple como una profecía
leyendo el misterio de la leyenda
que no se escribe: las vertientes gozosas
se erigen desde mi pecho y me expande,
me extiende olvidando los recuerdos
de aquel paraíso imperdible:
ya no existen en la memoria,
ya los vivo como esplendores de hoy
en mi geoda de mundo habitado,
tan diferente, tan de piedra
y agua, sin vientos de murmullo
vociferante, tan ausente
de todo lo que sobra.